
Análisis y Opinión
20/01/14
Como sólo sucedió en época de los gobiernos militares, el gobierno de Evo Morales, en su política fascista y corporativa, ordenó el viernes la intervención de las oficinas de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos con agentes uniformados y de civil de la Policía Nacional con el propósito de amedrentar e impedir la realización del XX Congreso Ordinario que la Asamblea de DDHH de La Paz. La intención concreta es impedir la renovación del directorio de la Asamblea de La Paz, presidido por la activista Amparo Carvajal, que se ha convertido en una molestia por las denuncias de las violaciones a los derechos humanos cometidas en esta gestión gubernamental. Sigue leyendo