
Una vez más debemos sumarnos a las denuncias vehementes que organizaciones de defensa de los derechos de los campesinos hacen en contra de la criminal política de persecución y muerte practicada por el Estado brasileño, a través de las fuerzas oscuras del latifundismo en la región de Rondonia.
No es ninguna novedad que en Brasil se persiga y asesine a militantes del movimiento campesino, en particular al movimiento clasista, y tampoco a luchadores sociales que simpatizan con esta causa. La careta de gobierno progresista que tanto defienden los revisionistas y oportunistas en Latinoamérica, de los gobiernos de Lula y Dilma, se ha caído hace tiempo, por el contrario la complicidad de estos gobiernos con los grandes terratenientes precisamente para promover el agronegocio es uno de los elementos fundamentales para aplastar la lucha campesina a sangre y fuego.
En esta ocasión denunciamos el asesinato del profesor Renato Nathan Gonçalvez Pereira en el Estado de Rondonia, un hombre de 28 años con una hija de 2 que trabajó en la organización de una campaña de alfabetización de jóvenes y adultos, en la construcción de escuelas y en la promoción de la producción en la región de Buritis. El profesor Renato fue una persona muy comprometida con el movimiento campesino de la región, precisamente una zona con un movimiento campesino que viene siendo perseguido brutalmente por el gobierno brasileño a través de pistoleros asesinos (muchas veces policías) al servicio de los latifundistas y en complicidad con autoridades estatales como el INCRA (similar al INRA en Bolivia).