Pobladores de Chulumani en cuarto día de vigilia pidiendo la renuncia del alcalde del MAS y sus concejales, algo que se ha repetido en varias localidades como Coripata, Chamaca y otros distritos donde los campesinos han resuelto expulsar a la gente del gobierno de Evo Morales. Foto: Periódico Erbol.
Análisis y Opinión
Nuevamente el gobierno de Evo Morales aplica el mismo libreto contra la manifestación popular; en este caso a la lucha de los cocaleros de los Yungas, y en el mismo gana una derrota política, como sucedió en un principio con la lucha de Achacachi. Pero el pueblo sabe por experiencia que el gobierno planifica lentamente el descabezamiento de la movilización y por eso el Ministro de Gobierno lanzó los infundios de que en los Yungas hay movimientos armados. Este fin de semana se ha dado un gran movimiento de rechazo al gobierno, muchas comunidades de los Yungas han realizado cabildos y han rechazado la acción de los afines y autoridades del MAS, han respaldado a su dirigencia reafirmándose en sus puntos de lucha entre las que destaca la abrogación de la Ley de la coca que favorece al Chapare, base cocalera de Evo Morales. Sigue leyendo